Por Alberto Valderrábano
El padre Marcelo Pérez de la parroquia de Cuxtitali, de San Cristóbal de las Casas, fue ejecutado a balazos la mañana de este domingo.
En días pasados el prelado ya había denunciado a medios de comunicación que en el municipio de Simojovel le pusieron precio a su vida, por la que ofrecían 150 mil, 400 mil y hasta un millón de pesos.
El sacerdote victimado había denunciado que Chiapas se encontraba en peligro por la presencia del crimen organizado.
El padre Marcelo Pérez circulaba en su vehículo por la calle Las Peras, esquina con calle Flanz Bloom, cuando fue interceptado por dos sujetos que viajaban en una motocicleta y portaban pasamontañas, mismos que dispararon contra la camioneta.
Los primeros reportes señalan que la mañana de este domingo, el prelado ofició una misa en el barrio de Cuxtitali.
Al culminar, Marcelo Pérez abordó su camioneta Ford Titanium de color blanco para dirigirse a la iglesia de Guadalupe, según datos oficiales.
Por su parte la Fiscalía General del Estado de Chiapas confirmó el deceso del padre Marcelo Pérez, después de ser atacado a balazos.
Después de escucharse los disparos, habitantes avisaron inmediatamente a las autoridades para que se dieran cita en el lugar de los hechos.
Inmediatamente miembros de la Policía de Investigación y personal de
Servicios Periciales se trasladaron a la calle Las Peras para llevar a cabo las primeras indagaciones.
Los efectivos policiacos que llegaron al lugar hallaron a un hombre con varios impactos de bala, en el interior de la camioneta.
Después de confirmaron que la víctima era el sacerdote Marcelo Pérez.
La Fiscalía del Estado de Chiapas explicó en un comunicado que, “en el lugar se encontró una camioneta color blanco con placas de circulación del estado de Chiapas y al interior una persona del sexo masculino sin signos vitales que respondía al nombre de Marcelo ‘N’, padre de la parroquia de Cuxtitali”.
Hasta el momento, los atacantes no han sido identificados, ni mucho menos se han realizado detenciones.
Inmediatamente el sector religioso se pronunció en contra de este crimen y condenó el asesinato del padre Marcelo Pérez.
El Seminario Conciliar de San Cristóbal repartió una esquela con una foto de la víctima, dónde resaltó que recordarán al padre Mario como “pastor, hermano y amigo del pueblo”.
Asimismo, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) condenó el asesinato del padre Marcelo Pérez e hizo un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno para esclarecer el crimen.
En un comunicado el CEM resaltó, “Este acto de violencia, perpetrado al terminar la misa cuando el padre salía para continuar con sus labores pastorales, no solo priva a la comunidad de un pastor dedicado, sino que también silencia una voz profética que incasablemente luchó por la paz con verdad y justicia en la región de Chiapas”.
